Durante el primer cuatrimestre del año en curso, el Ministerio de Salud destinó un total de 20.1 millones de bolivianos al sector salud, cubriendo no solo las necesidades hospitalarias sino también programas específicos dirigidos a pacientes con cáncer y aquellos que requieren hemodiálisis.
La Dirección General del Sistema Nacional de Salud, entidad dependiente del Ministerio y a cargo de María Bolivia Rhote, administra el Sistema Único de Salud (SUS). Este sistema, regido por la ley 1162, tiene entre sus funciones el financiamiento de 39 hospitales de tercer nivel en el país.
En el departamento de Tarija, el SUS proporciona financiamiento a centros como el hospital “Virgen de Chaguaya”, el “San Juan de Dios”, el Materno Infantil y el Intraid. Las transferencias realizadas a estos hospitales durante el primer cuatrimestre alcanzaron los 16,741,806 bolivianos, registrando una ejecución promedio del 60%.
Adicionalmente, el SUS apoya la lucha contra el cáncer, habiendo destinado 2,136,172 bolivianos a este fin. La ejecución en el hospital “San Juan de Dios” para este programa fue del 38%. Para la atención de salud renal y hemodiálisis, incluyendo centros en Bermejo, se transfirieron 1,268,000 bolivianos, con una ejecución del 64%.
El monto total transferido por el Estado al departamento de Tarija en el cuatrimestre suma 20,146,929 bolivianos. Se enfatizó que las adquisiciones dentro del sistema se realizan en moneda nacional, el boliviano, y no en dólares, ya que los fondos gestionados por el Estado son en esta divisa.
Respecto a la adquisición de medicamentos, existen normativas específicas que rigen este proceso, como la adhesión a la Lista Nacional de Medicamentos (LINAME). Se aclaró que la compra de fármacos, insumos y reactivos es responsabilidad de los gobiernos departamentales, propietarios de los hospitales. Estos gobiernos, a través de sus áreas administrativas y en coordinación con los hospitales, son quienes establecen y ejecutan los procedimientos de compra. La función del gobierno nacional se limita a la transferencia de los recursos económicos.
Se subrayó que la cartera de Salud no interviene directamente en el proceso de adquisición de medicamentos. Por tanto, si surgieran dificultades en este ámbito, estas recaerían en los responsables de las gobernaciones y los hospitales, dado que son ellos quienes tienen la tuición sobre los fondos recibidos y la gestión de las compras.
Ante cuestionamientos sobre posibles problemas en la adquisición de medicinas, incluyendo referencias a la disponibilidad de divisas, se proporcionaron detalles sobre la composición de la LINAME. De los 710 medicamentos incluidos en esta lista, aproximadamente el 64.8% son de fabricación nacional. Se reconoció que una menor proporción de medicamentos son importados. Sin embargo, se enfatizó que el aspecto relacionado con la disponibilidad de dólares no es competencia del Ministerio de Salud, sino que corresponde al Ministerio de Economía y Finanzas Públicas y al Banco Central, en el marco de su política monetaria. Se indicó que no se tienen comentarios al respecto desde la perspectiva de la cartera de Salud.
El Ministerio de Salud ha procedido a modificar la LINAME, incorporando casi 29 medicamentos adicionales, especialmente para tratamientos oncológicos y renales, y se evalúan futuras inclusiones. Se reiteró que la cuestión de las divisas escapa al control de esta cartera. Se mencionó que los hospitales tienen la facultad de realizar compras menores directamente.
Se sugirió que, si las gobernaciones y los hospitales hubieran llevado a cabo los procesos de compra de manera anticipada, cuando disponían de los fondos, podrían haber evitado algunas de las dificultades actuales. Se expresó que hubo una demora en la ejecución de estas adquisiciones y que una actuación más oportuna habría derivado en una situación diferente.
Consultada sobre si la responsabilidad de resolver el problema de la disponibilidad de dólares a nivel nacional recae en el gobierno en su conjunto, la funcionaria declinó responder directamente. Explicó que su área de experticia es la medicina, no las finanzas, y que esa consulta debería dirigirse al área financiera correspondiente