La administración departamental de Tarija ha manifestado su incapacidad para continuar financiando los ítems de personal de salud correspondientes a los niveles de atención primaria y secundaria. El gobernador Oscar Montes Garzón ha señalado que la entidad departamental carece de los recursos económicos necesarios para mantener esta responsabilidad.
Según lo expresado, la carga financiera de estos puestos de trabajo en el sector salud recae, por normativa, en el Gobierno Nacional. Esta solicitud no es una novedad; desde el inicio de la actual gestión departamental, se ha instado de manera recurrente a la migración de dichos ítems al nivel central. La postura es que el gobierno departamental no puede seguir asumiendo competencias que no le corresponden, especialmente ante la limitación de su capacidad financiera.
Se considera urgente que el Gobierno Nacional asuma esta obligación para asegurar el correcto funcionamiento del sistema de salud y la atención continuada a la ciudadanía en los primeros dos niveles de asistencia
