Un notable incremento en los precios de la carne, tanto de res como de cerdo, ha generado preocupación en Tarija, afectando directamente el poder adquisitivo de los consumidores. Según observaciones recientes del director del Matadero Municipal de Tarija, esta escalada de costos representa un desafío significativo para la economía local.
El costo del kilo de carne de cerdo en pie, que previamente oscilaba entre 15 y 16 bolivianos, ha alcanzado ahora los 35 bolivianos en las instalaciones del matadero. Este aumento, que prácticamente duplica el valor anterior, se ha producido sin una justificación clara. Una situación similar se observa en el sector de la carne bovina, donde el precio del kilo en pie ha pasado de 26 a 44 bolivianos. Este ajuste al alza inevitablemente se traduce en un costo final mucho mayor para el consumidor, quienes deben asumir el incremento para que los comercializadores mantengan sus márgenes de ganancia.
Ante este panorama, se han cursado comunicaciones a las autoridades pertinentes con el fin de solicitar la elaboración de una hoja de costos detallada, en colaboración con los sectores productores. Se espera que estos últimos presenten las razones que sustentan tales incrementos. Si bien algunos actores del sector han atribuido la subida de precios al aumento de los insumos y a la escasez de combustible, se ha señalado que la situación del abastecimiento de carburantes ha mejorado sustancialmente en las últimas semanas, sin registrarse las largas filas observadas previamente.
El encarecimiento de la carne en pie ha tenido una repercusión directa en la cantidad de ganado faenado diariamente en el Matadero Municipal. La capacidad de compra de la población se ha visto mermada, lo que consecuentemente reduce la demanda de servicios del matadero y, por ende, sus ingresos. Actualmente, las instalaciones procesan aproximadamente 60 cabezas de ganado al día, cifra que se eleva a entre 90 y 100 reses durante los fines de semana, en respuesta a la mayor demanda ciudadana. Toda la carne procesada en el matadero municipal se distribuye posteriormente a los diversos centros de abasto y mercados de la ciudad de Tarija.
Se anticipa la convocatoria a una mesa de diálogo en los próximos días, reuniendo a productores y comercializadores de carne, con el objetivo de asegurar un abastecimiento regular y la estabilidad de los precios para la población
