Un persistente incendio forestal, que se originó el 2 de septiembre en la localidad de Trancas, dentro del municipio de San Lorenzo, sigue siendo una amenaza crítica para la Reserva Biológica de la Cordillera de Sama (RBC-Sama).
Los esfuerzos iniciales para controlar la conflagración vieron a los guardaparques del SERNAP Sama, junto a brigadistas voluntarios de los Bomberos “Caballeros de Fuego” y miembros de las comunidades locales, trabajar arduamente. Su labor permitió redirigir las llamas en el flanco derecho desde el sector de Huacaya. No obstante, al caer la noche de ese mismo día, alrededor de las 22:00, la tarea de contención en Trancas recayó exclusivamente en los guardaparques y los comunarios.
La madrugada del 3 de septiembre marcó un punto crítico. Aproximadamente a las 05:00, el fuego resurgió con renovada fuerza. Impulsado por ráfagas de viento considerables, las llamas se extendieron rápidamente, alcanzando la comunidad de Chamata, un área comunal vital dentro de la RBC-Sama, ahora en jurisdicción del municipio de El Puente.
Ante la escalada de la emergencia, se ha puesto en marcha un dispositivo de respuesta interinstitucional y multisectorial. Esta operación conjunta agrupa a las administraciones municipales de El Puente, San Lorenzo y Cercado, la Unidad de Gestión de Riesgos (UGR) dependiente de la Gobernación de Tarija, efectivos de la Policía Boliviana y diversas brigadas de bomberos voluntarios. Todos estos equipos están actualmente desplegados en el terreno, dedicados a la ardua labor de extinguir el foco ígneo.
En este contexto de riesgo elevado, las autoridades han emitido una vehemente advertencia. Hacen un llamado a los habitantes de las comunidades y a quienes visitan las áreas rurales a extremar las precauciones, absteniéndose de encender cualquier tipo de fuego. El objetivo es prevenir nuevas igniciones que puedan comprometer aún más el frágil ecosistema de la región y poner en peligro la seguridad de sus poblaciones