Rubén Ríos, líder de la Confederación Nacional de Panificadores de Bolivia (Conapabol), fue detenido en horas de la tarde de este lunes en el marco de una investigación relacionada con la harina subvencionada que recibía de la Empresa de Apoyo a la Producción de Alimentos (Emapa).
El pasado viernes 28 de noviembre, entre las 16:00 y 17:00, agentes encubiertos del Ministerio Público y de la Policía Anticorrupción llevaron a cabo un allanamiento en su domicilio. Esta acción se produjo luego de que, durante una inspección realizada por la Alcaldía de La Paz un día antes, se encontraran condiciones insalubres en el horno del dirigente panificador, incluyendo la presencia de heces de roedores, lo que motivó la clausura del establecimiento por razones sanitarias.
Ríos había sido citado para declarar el miércoles 3 de diciembre en relación a presuntas irregularidades detectadas en Emapa durante la administración del exgerente Franklin Flores. Entre los cargos que se le imputan figuran incumplimiento de deberes, enriquecimiento ilícito, conducta antieconómica y la celebración de contratos perjudiciales para el Estado.
En declaraciones breves durante su aprehensión, el dirigente se declaró inocente y afirmó que el proceso en su contra responde a “afanes políticos” vinculados con la subvención de la harina destinada a la elaboración del pan de batalla, señalando además que “el precio del pan es político”
