María Lourdes Vaca, quien ocupa el cargo de Secretaria de Desarrollo Humano en la Gobernación de Tarija, ha destacado la imperante necesidad de adquirir un nuevo tomógrafo para el Hospital de tercer nivel de la región. Este equipo, que es el único de su tipo en el departamento, ha llegado al final de su ciclo operativo. Su función es crucial, ya que está disponible las 24 horas y atiende a alrededor de 65 pacientes diariamente. Sin embargo, su estado actual genera preocupación, ya que presenta fallas que subrayan la urgencia de su reemplazo.
Vaca ha mencionado que, a pesar de los intentos realizados ante el Gobierno Nacional para obtener un nuevo tomógrafo antes de finalizar el año, se han presentado obstáculos que complican la situación. La licitación promovida por el gobierno y el ministerio no ha avanzado como se esperaba, lo que ha suscitado dudas sobre los plazos de entrega del nuevo equipo. La ausencia de un tomógrafo en condiciones puede tener un impacto negativo en la atención de los pacientes en lo que se considera el principal centro de salud de Tarija.
Además, Vaca ha señalado que financiar un nuevo tomógrafo con recursos del departamento resulta prácticamente inviable, dado que su costo supera los 18 millones de bolivianos. Esta cifra considerable pone de manifiesto la dependencia del departamento de los recursos y la gestión del gobierno central para garantizar una atención médica adecuada.
A pesar de las adversidades, el tomógrafo actual sigue operando, brindando servicio a la comunidad, aunque su estado plantea riesgos. Los pacientes y la población en general están anhelando la llegada de un nuevo equipo, que no solo mejoraría la calidad de la atención, sino que también aliviaría la presión sobre un sistema de salud que ya enfrenta serios desafíos.
Vaca ha subrayado la obligación del Gobierno Nacional de atender las necesidades de la población en el ámbito de la salud. La esperanza es que durante este año se logre conseguir el equipo necesario para optimizar los servicios de salud en Tarija. La comunidad permanece atenta, esperando una respuesta favorable que garantice una mejora en la atención sanitaria para los tarijeños