En Bolivia, un número significativo de familias se enfrenta a una grave crisis debido a las intensas lluvias e inundaciones que han afectado a diversas regiones, especialmente en La Paz y Cochabamba. Hasta la fecha, se han contabilizado 161,125 familias impactadas por esta situación, lo que ha llevado a muchos a evacuar sus hogares por el riesgo de deslizamientos.
En Cochabamba, la Alcaldía de la Organización Territorial de Base (OTB) Nuevo Amanecer ha declarado una alerta roja tras un deslizamiento que ocurrió recientemente, dañando varias viviendas. Según los líderes comunitarios, al menos diez familias han tenido que abandonar sus hogares debido a la aparición de grietas en las estructuras.
Las autoridades locales han señalado que 21 viviendas presentan daños estructurales considerables, y han advertido que alrededor de 90 casas están en peligro inminente. Ante esta situación, las familias afectadas han comenzado a trasladar sus pertenencias, incluidos muebles y electrodomésticos, a un albergue temporal mientras se llevan a cabo estudios técnicos en la zona.
Por otro lado, en el municipio de Caranavi, en la región de La Paz, el desbordamiento del río principal ha provocado inundaciones en numerosas viviendas y calles. Los líderes de la comunidad han declarado el estado de emergencia y han solicitado asistencia a las autoridades municipales para retirar los escombros y ayudar a recuperar pertenencias arrastradas por el agua.
El Gobierno boliviano ha movilizado al Ejército para atender emergencias en todo el país, con más de 3,000 soldados desplegados para facilitar las evacuaciones. Según el viceministro de Defensa Civil, Juan Carlos Calvimontes, las regiones más afectadas son La Paz y Cochabamba, con un total de 380 viviendas destruidas, siendo La Paz la más impactada con 319 casas colapsadas.
El Servicio Nacional de Meteorología e Hidrología (Senamhi) ha pronosticado que las lluvias persistirán durante el fin de semana en La Paz, Oruro y Potosí, advirtiendo sobre un aumento en los niveles de los ríos. Hasta el momento, se reportan 39 personas fallecidas y siete desaparecidas debido a esta crisis, que ha afectado a las nueve regiones del país desde noviembre de 2024.
La alerta naranja por lluvias se mantendrá vigente en los próximos días, reflejando la gravedad de la situación en Bolivia