Un incendio forestal, provocado por la caída de un rayo, se desató el jueves por la noche en la zona de Sella Quebradas, llevando al gobierno municipal a declarar una alerta de 24 horas. A pesar de la ausencia de precipitaciones en el área, el impacto de la descarga eléctrica originó el fuego, que requirió de grandes esfuerzos por parte de los bomberos de la Policía para ser controlado y evitar su propagación por la serranía. La vigilancia se mantiene activa para asegurar que no queden rescoldos que puedan reavivar las llamas.
En paralelo, la administración municipal ha iniciado los trabajos de reparación en la infraestructura urbana, priorizando los techos de los mercados que sufrieron graves daños a causa de las recientes granizadas. Específicamente, el mercado central está siendo intervenido para reemplazar el material plástico de su cubierta por calaminas de policarbonato traslúcido de alta calidad, con la expectativa de que resistan futuros fenómenos meteorológicos. Se ha asegurado que todos los techos de los mercados serán reparados.
La emergencia se extiende también al alumbrado público, que presenta un 50% de daños, y se están adquiriendo los repuestos necesarios para restaurar todo el sistema. Los semáforos de la ciudad también resultaron severamente afectados, al igual que numerosas cámaras de vigilancia del proyecto Ciudad Inteligente, que quedaron inoperativas. Se ha recibido una respuesta de la Autoridad de Telecomunicaciones (ATT) que está siendo objeto de análisis.
En las áreas rurales, la situación de emergencia persiste en localidades como San Andrés, San Pedro de Sola y Obrajes, donde los equipos municipales continúan trabajando. Aunque los trabajos de reparación se están llevando a cabo con urgencia, aún no se ha estimado el costo total de las intervenciones. Se espera precisar una cifra una vez concluidas las tareas y se elaboren los informes técnicos correspondientes, todo ello en el marco del decreto de emergencia promulgado recientemente.
Además de los daños mencionados, se reportan afectaciones en la infraestructura deportiva, de salud y educativa. En cuanto a las medidas preventivas, se informó que se distribuyeron y lanzaron mil bombas caseras antigranizo en el campo, lo que se cree contribuyó a reducir la intensidad de la granizada en esas zonas. Sin embargo, en la ciudad, donde no se utilizaron estas bombas hace más de una semana, el impacto de la granizada fue considerablemente mayor. Ante esta situación, el municipio está adquiriendo más de mil bombas adicionales, algunas de las cuales se destinarán a la protección urbana. Cada una de estas bombas, con un costo de 49 bolivianos, contiene yoduro de plata, un componente que se considera efectivo para descongelar el hielo en las nubes y permitir que caiga únicamente agua
 
								
 
																											 
												 
												 
												 
             
             
					