A poco más de dos semanas del asesinato del capitán de la Policía José Carlos Aldunate Meneses, el fiscal general del Estado, Roger Mariaca, ha proporcionado una actualización sobre el avance de las investigaciones, que se mantienen en curso. Para asegurar la integridad del proceso, se ha declarado una reserva de diez días, durante los cuales se llevarán a cabo diversas diligencias. En este momento, hay cuatro personas detenidas, de las cuales tres enfrentan medidas de detención preventiva.
El trágico incidente ocurrió alrededor de las 08:09 del 19 de febrero, cuando una vagoneta obstruyó el paso del vehículo del oficial, quien se disponía a salir de su garaje en la avenida Alemana, en Santa Cruz. En un ataque relámpago, los agresores dispararon en 27 ocasiones, resultando en la muerte del capitán, quien pertenecía al Batallón de Seguridad Física Estatal y estaba bajo la supervisión del viceministro de Régimen Interior y Policía, Jhonny Aguilera, que se encontraba en la ciudad en ese momento.
Mariaca destacó la importancia de la reserva del caso, enfatizando que aún quedan varias diligencias por realizar. “Es crucial identificar tanto a los autores intelectuales como a los materiales de este grave hecho”, subrayó, recordando que es responsabilidad de la Policía, bajo la dirección del Ministerio Público, esclarecer los detalles del caso.
El pasado viernes, los tres primeros detenidos fueron enviados a la cárcel de Palmasola. Se trata de Dedila Silvana S.M., Elena O.P. y Cristian R.D., quienes supuestamente tienen vínculos familiares y de amistad con dos de los presuntos sicarios implicados en el asesinato de Aldunate. Además, un cuarto detenido, Jesús Alexander T.H., es cuñado de la propietaria de la vivienda donde fue hallada la vagoneta utilizada en el ataque
