El contingente de la selección boliviana de fútbol se encuentra finalmente completo en Estambul, marcando un hito para el cuerpo técnico liderado por Óscar Villegas. La jornada del miércoles presenció la incorporación de Moisés Villarroel a las sesiones de entrenamiento, lo que permitió al estratega nacional contar por primera vez con la totalidad de los jugadores convocados.

La plantilla se vio reforzada también con la llegada del atacante José Martines, proveniente del CSKA 1948 de Bulgaria, quien fue llamado para suplir la baja de Lucas Macazaga, desafectado de la convocatoria debido a una dolencia muscular. Estas últimas adiciones consolidan el grupo, que arribó a la capital turca el pasado lunes y ya ha completado dos sesiones de trabajo, con la del miércoles siendo la primera con todos los efectivos. La tardía incorporación de Villarroel se debió a una autorización especial de la federación para que el mediocampista disputara un encuentro con su equipo, Blooming, el domingo anterior.

La plena disponibilidad de todos los futbolistas permite al seleccionador afinar las estrategias y ensayar diversas configuraciones tácticas. Con la mira puesta en el primer compromiso de esta doble jornada FIFA, el equipo se prepara para enfrentar a Jordania este viernes a las 12:00 (hora boliviana). La última práctica antes de este encuentro se llevará a cabo el jueves, cerrando la fase de preparación en suelo turco.

Respecto a la conformación del once inicial, se anticipa que Villegas mantendrá la columna vertebral que ha venido utilizando en los recientes encuentros de las Eliminatorias Sudamericanas. Sin embargo, una modificación obligada se perfila en la zaga central: la lesión de Efraín Morales, habitual compañero del capitán Luis Haquin, abre la puerta para que el joven defensor Diego Arroyo asuma la titularidad en esa posición.

La posición de centro delantero, que aún no cuenta con un titular indiscutible, representa otro punto de análisis para el cuerpo técnico. El estratega ha rotado entre Enzo Monteiro y Carmelo Algarañaz en compromisos anteriores, y se espera que ambos sean evaluados nuevamente durante estos amistosos con el fin de determinar quién se afianzará en el rol principal.

Estos encuentros amistosos son cruciales para el seleccionador, quien busca afianzar su propuesta táctica y proporcionar rodaje al grupo que aspira a disputar el repechaje mundialista. El enfrentamiento contra Jordania servirá como el primer examen de esta gira internacional, fundamental para calibrar el desempeño colectivo del equipo. Tras este partido, la delegación emprenderá viaje a Moscú, donde el martes próximo se medirá ante la selección de Rusia en el segundo y último amistoso programado para el mes de octubre

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