La fuerza policial del país ha experimentado una reestructuración significativa en su cúpula de mando, con la investidura formal de veinte nuevos generales. Este acontecimiento crucial se produjo tras la promulgación del decreto 5462, y la ceremonia fue presidida por el presidente en ejercicio, David Choquehuanca.
En el mismo acto, el general Augusto Russo fue ratificado como comandante general de la institución, consolidando así el Estado Mayor Policial. Su nombramiento es de particular relevancia, ya que cumple plenamente con los requisitos establecidos por la ley 1387, promulgada en 2021. El comandante general destacó que este avance representa la consolidación de la estructura organizacional prevista en dicha normativa, además de materializar un anhelo de los oficiales ascendidos, quienes han dedicado más de 35 años a la institución. Subrayó que estas promociones a general refuerzan el compromiso de servicio a la sociedad y abren una perspectiva hacia una policía más sólida, profesional y humana.
Cabe señalar que, desde 2021, los comandantes de la Policía habían ocupado sus cargos de manera interina, debido a que la ley 1387 exige que el líder de la institución ostente el rango de General Superior. Con esta designación, el general Augusto Russo se convierte en el primer comandante de la Policía en satisfacer plenamente esta condición legal.
La ley 1387, en su artículo 32, también establece que los tres cargos principales de la Policía deben ser ocupados por un General Superior, una disposición que se ha cumplido. De igual manera, los cuatro directores nacionales y el presidente del Tribunal Superior deben ser Generales Mayores, aspecto que también se ha implementado con las recientes designaciones.
Otro progreso alcanzado con el nuevo decreto se refiere a la conformación de los comandos departamentales. La normativa indica que estos deben ser liderados por Generales Primeros, y esta medida se ha aplicado en la mayoría de los departamentos, a excepción de Beni y Potosí, donde los nombramientos se realizaron en calidad de interinos.
Durante la imposición de grados, el ministro de Gobierno, Roberto Ríos, enfatizó que los ascensos a general son el resultado del mérito, la trayectoria, la disciplina y la vocación de servicio. Reconoció la entrega y el compromiso de los oficiales, e instó a que la sociedad espera de ellos no solo firmeza, sino también humanidad, cercanía y un respeto absoluto por los derechos fundamentales.
A pesar de estos importantes avances, la ley 1387 también contemplaba la elaboración de dos leyes complementarias: la “Ley de Plan de Carrera de la Policía Boliviana” y la “Ley de los procesos de evaluación de desempeño y calificación para ascensos”. La primera se encuentra actualmente en trámite parlamentario, mientras que la segunda aún no ha sido presentada