El gobierno regional de Rio Grande do Sul informó que cinco personas murieron y 18 están desaparecidas debido a las intensas lluvias que afectaron a 77 municipios del estado. Se registraron seis heridos y casi 300 personas tuvieron que abandonar sus hogares. El presidente Lula da Silva ofreció ayuda y las autoridades están concentradas en el rescate de las personas aisladas por las inundaciones. Se esperan más lluvias en las próximas horas y hay riesgo de inundaciones en algunas áreas. Las labores de rescate se intensificaron en el municipio de Candelaria, donde la situación es crítica. En marzo, fuertes lluvias en el sureste del país dejaron 25 muertos, mientras que en febrero una ola de calor afectó a Rio Grande do Sul. Los expertos atribuyen estos fenómenos al cambio climático y a una agudización del fenómeno de El Niño.
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