Un tribunal ha resuelto imponer detención domiciliaria al conductor del autobús implicado en el fatal accidente registrado en la región de Morochata. Este siniestro vial resultó en el deceso de diecinueve individuos y dejó a múltiples personas con lesiones.
El implicado, identificado como Herminio P., de veintitrés años, enfrenta cargos por homicidio y por la comisión de lesiones graves y gravísimas en el contexto de un suceso de tránsito. Las estipulaciones judiciales para Herminio P. incluyen una fianza de veinticinco mil bolivianos y la implementación de vigilancia policial intermitente en su domicilio de Cochabamba, donde cumplirá la medida cautelar.
En cuanto a las víctimas fatales, catorce eran mujeres y cinco hombres, según las cifras oficiales. No obstante, familiares de catorce de los fallecidos optaron por no trasladar los cuerpos a la morgue, impidiendo la realización de exámenes forenses y procediendo directamente con la sepultura.
El Ministerio Público ha iniciado una investigación de oficio, que incluye un análisis técnico-científico exhaustivo del vehículo siniestrado. Como parte de esta pesquisa, se ha requerido a Univida el historial del Seguro Obligatorio de Accidentes de Tránsito (SOAT), así como a la Aduana Nacional la documentación referente a la póliza de importación y la configuración mecánica de la unidad. Se ha subrayado la importancia de determinar la responsabilidad penal del conductor y de verificar si poseía la habilitación necesaria para operar un vehículo de estas características.
Los informes preliminares revelan que el autobús no contaba con el SOAT vigente y que no había sido sometido a las inspecciones técnicas vehiculares (ITV) obligatorias en al menos los últimos ocho años. Adicionalmente, se ha constatado que el vehículo acumulaba multas por elusión de controles. Frente a estos hallazgos, la Fiscalía se encuentra preparando nuevas diligencias procesales y no descarta una posible ampliación de los cargos a medida que la investigación progrese.
El lamentable suceso se registró el lunes 27 de octubre, aproximadamente a las 09:00 horas, durante el recorrido que conecta Quillacollo con la región andina. El autobús precipitó por un barranco en una zona de acceso complicado, específicamente a la altura de la comunidad de Corata, lo cual dificultó significativamente las operaciones de rescate y la evacuación expedita de los heridos.
Mientras el proceso judicial avanza, las familias de las víctimas demandan una clarificación exhaustiva sobre el estado mecánico del vehículo, la supervisión ejercida por las autoridades competentes y las condiciones operativas de los servicios de transporte interprovincial que enlazan las comunidades más remotas del país
 
								
 
																											 
												 
												 
												 
             
             
					 
					 
					