El diputado Edwin Rosas, representante de Comunidad Ciudadana, ha afirmado que las denuncias sobre posibles irregularidades en Servicios Eléctricos de Tarija (Setar) están respaldadas por una sólida documentación. En las últimas semanas, Rosas ha denunciado que algunos residentes han recibido facturas excesivas, lo que atribuye a la falta de lecturas mensuales de los medidores, un problema que afecta principalmente a las áreas rurales y periurbanas de la ciudad.
Además, el legislador ha señalado que hay un posible favorecimiento hacia dos empresas en la adquisición de medidores, las cuales estarían vendiendo a precios inflados. Rosas ha expresado su preocupación por la falta de respuesta de las autoridades de Setar y del Gobierno Departamental ante estas acusaciones.
El diputado está en proceso de compilar toda la documentación necesaria para presentar formalmente sus denuncias ante la Contraloría General del Estado, la Autoridad de Fiscalización de Electricidad y Tecnología Nuclear (AETN), así como ante el Ministerio Público. Según Rosas, este asunto podría ser solo el inicio de un entramado de corrupción dentro de Setar.
Un caso particular que ha llamado la atención es el de una vecina de Tomatitas, quien habitualmente paga alrededor de 200 bolivianos mensuales por el servicio eléctrico. Sin embargo, recibió facturas que ascendían a 800 y más de 1000 bolivianos. Tras dialogar con el gerente comercial de Setar, se acordó que no se interrumpiría el suministro eléctrico hasta que se resolviera la discrepancia en su factura.
Rosas también ha realizado una Petición de Informe Escrito (PIE) a Setar, donde tras revisar la información, descubrió que la compra de medidores y otros materiales eléctricos se ha concentrado en dos empresas específicas. Ha denunciado que estas adquisiciones han estado dirigidas, lo que ha generado quejas de otros proveedores de material eléctrico sobre el posible favoritismo en el proceso de compra.
Desde 2021, las compras de material eléctrico se han limitado a las empresas Kavalkanti y Albiceleste. Rosas ha iniciado una investigación sobre estas transacciones, destacando que Setar gasta entre 4 y 5 millones de bolivianos al año en la compra de medidores. Aunque la respuesta a su solicitud de información no fue inmediata, finalmente recibió documentación que reveló que las adquisiciones estaban diseñadas para beneficiar a solo estas dos empresas.
El diputado ha señalado que los precios de los medidores adquiridos por Setar son significativamente más altos que los precios del mercado local. Por ejemplo, en una compra realizada en 2022, Setar pagó 200 bolivianos por cada medidor, mientras que en el mercado La Loma el mismo producto se podía encontrar por 120 bolivianos.
Rosas ha llevado a cabo un seguimiento a las empresas proveedoras y ha verificado que las direcciones que figuran en las facturas no corresponden a sus oficinas reales. Además, ha descubierto que ambas empresas comparten la misma dirección y son gestionadas por una pareja de esposos, lo que plantea interrogantes sobre la transparencia en el proceso de adquisición de materiales por parte de Setar. El diputado también ha indicado que se están investigando otras compras de material eléctrico por parte de la empresa, donde podrían encontrarse irregularidades similares
