Las autoridades bolivianas detuvieron recientemente a Luis Fernando É. R., un individuo que se encontraba evadiendo la justicia tras la emisión de una orden de captura por su presunta implicación en el asesinato de Adolfo Raldes Algarañaz. Raldes, un mototaxista de 42 años, fue víctima de un ataque con arma blanca que resultó fatal el fin de semana pasado en el barrio Virgen de Cotoca, en el municipio de Montero, Santa Cruz.
El principal responsable del homicidio, Andrés É. R., hermano del recién aprehendido y actual pareja de la expareja de la víctima, ya fue condenado días atrás a tres décadas de reclusión en el Centro de Readaptación Productiva de Montero (Cerprom), sin posibilidad de indulto, por el delito de asesinato. Esta sentencia se dictó mediante un acuerdo procesal. Asimismo, Wendy A. M., la pareja del sentenciado, fue sometida a detención preventiva por un periodo de seis meses en el penal de Cerprom, acusada de complicidad en los hechos. Con la captura de estas tres personas, la investigación policial considera el caso resuelto.
De acuerdo con los elementos recabados por el Ministerio Público, Luis Fernando habría presuntamente facilitado la fuga de su hermano Andrés y de Wendy tras la comisión del crimen, proporcionando un medio de transporte en motocicleta y colaborando en su intento de eludir a las fuerzas del orden.
La Fiscalía confirmó que, tras obtener elementos probatorios adicionales, se emitió una orden de aprehensión contra Luis Fernando, quien fue localizado y capturado en su domicilio en Montero. Posteriormente, fue trasladado a las dependencias de la Fuerza Especial de Lucha Contra el Crimen (Felcc) para rendir su declaración ante las autoridades. Las inconsistencias en su testimonio llevaron al Ministerio Público a formalizar su aprehensión y posterior imputación.
El incidente ha sido calificado como un acto de violencia motivado por conflictos sentimentales. Se ha solicitado que el recién detenido enfrente la pena máxima de 30 años de prisión, considerando que su intervención fue crucial para la huida de los implicados y entorpeció las primeras etapas de la investigación. La familia de la víctima ha reiterado su demanda de justicia, calificando el hecho como un acto brutal y exigiendo que todos los involucrados asuman su responsabilidad por el ataque con una puñalada directa al corazón.
El suceso ocurrió cuando Adolfo Raldes fue agredido con un arma punzocortante por el cónyuge de su expareja, Wendy, en el contexto de una disputa que escaló fatalmente. El informe forense confirmó que la causa del deceso fue una hemorragia masiva provocada por una herida en el tórax.
Tras la aprehensión de Luis Fernando, la Felcc confirmó que todas las personas vinculadas al suceso se encuentran bajo resguardo policial, dando por concluida una investigación que generó profunda consternación en la región del Norte Integrado de Santa Cruz. Los allegados al fallecido han expresado su confianza en que este arresto asegura que ningún responsable evadirá la justicia, enfatizando la necesidad de una aplicación rigurosa de la ley.
Se anticipa que en las próximas horas se llevará a cabo la audiencia de medidas cautelares para Luis Fernando, mientras la familia de Adolfo Raldes mantiene su clamor por una justicia ejemplar ante el crimen que segó la vida del mototaxista en Montero
