La ciudad de Tarija lamenta el fallecimiento de Raúl Pantoja, el célebre lustrabotas, quien sucumbió en la madrugada de hoy tras una prolongada enfermedad oncológica y los tratamientos recibidos.
En las últimas dos semanas, diversas entidades públicas y privadas, junto a figuras de autoridad, habían impulsado una campaña de recaudación de fondos para costear su tratamiento médico, apelando a la generosidad ciudadana.
Pantoja trascendió las fronteras de Tarija, alcanzando reconocimiento a nivel nacional por su incansable labor social. Su iniciativa más destacada, Una Monedita de Oro, benefició a innumerables niños y madres.
Cariñosamente apodado Pantojita, capitalizaba su notoria presencia pública y su buena relación con la prensa para movilizar a la comunidad en torno a sus causas benéficas. Durante el ejercicio de su labor diaria, solía exhortar a sus clientes habituales a cultivar la empatía y brindar apoyo a quienes carecían de recursos básicos.
Los servicios funerarios se llevan a cabo en su residencia privada, situada en el barrio La Florida