La administración departamental de Tarija ha anunciado la imposibilidad de continuar con el pago del bono de vacunación destinado a los trabajadores del sector salud, citando una severa restricción presupuestaria. El gobernador Oscar Montes Barzón explicó que la entidad carece actualmente de los fondos necesarios para sostener este beneficio.
El desembolso asociado a este incentivo asciende a una cifra aproximada de 8 millones de bolivianos. Montes detalló que, en periodos fiscales anteriores, durante los años de mayor bonanza económica, el departamento percibía ingresos que podían alcanzar los 200 millones de bolivianos al mes. Sin embargo, a raíz de la drástica disminución en la producción y comercialización de hidrocarburos, las recaudaciones mensuales se han contraído significativamente, situándose en la actualidad en torno a los 20 millones de bolivianos.
Se advirtió que mantener el abono de este bono implicaría desatender otros programas sociales de carácter prioritario, lo cual resulta insostenible para la sostenibilidad financiera del departamento. La autoridad departamental recordó que la implementación de este beneficio se produjo en un contexto económico radicalmente diferente al actual. Enfatizó que, si bien el bono fue establecido en un periodo de mayor disponibilidad de recursos, la realidad financiera presente impide asumir compromisos de tal magnitud.
Finalmente, se hizo un llamado a los profesionales del sector sanitario para que comprendan la delicada coyuntura económica que atraviesa el departamento. Se subrayó la importancia de que todos los involucrados entiendan la actual escasez de recursos que imposibilita la continuidad del pago de este bono
