Las intensas lluvias que azotaron la región el pasado domingo han dejado un saldo creciente de afectados. En respuesta a esta crisis, el Gobierno Municipal, en colaboración con las Fuerzas Armadas, ha comenzado a desplegar maquinaria para limpiar las calles y barrios que se encuentran cubiertos de lodo.
Blanca Peñaloza, una de las autoridades locales, informó sobre la habilitación de un centro de acopio en el municipio, donde se están recolectando productos y víveres para ayudar a las familias que han sufrido pérdidas significativas. Además, se están organizando ollas comunes para proporcionar alimentos a aquellos que han perdido todo.
Peñaloza hizo un llamado a la solidaridad de la comunidad tarijeña, instando a los ciudadanos a contribuir con cualquier tipo de ayuda, desde muebles y ropa hasta alimentos y utensilios de cocina. “Muchas familias se han quedado sin nada y es crucial que podamos apoyarlas para que puedan recuperarse”, expresó.
Por su parte, el alcalde de Tarija, Johnny Torrez, destacó que hay dos áreas que han sido particularmente afectadas: la Víbora Negra y el sector de la quebrada en la Avenida los Menbriollos. Aseguró que las labores de evaluación de daños continúan.
Torrez también mencionó que, una vez superada la emergencia, se analizarán las causas del desastre para implementar medidas que eviten que situaciones similares ocurran en el futuro. Según sus declaraciones, las lluvias alcanzaron los 80 milímetros, lo que representa más del 10% del total de precipitaciones esperadas, contribuyendo significativamente a la crisis actual