María José Gallardo, una talentosa ajedrecista de solo 8 años, ha dejado una huella imborrable en el mundo del ajedrez al consagrarse campeona en el Torneo Sudamericano 2024, celebrado en Uruguay. Proveniente de San Lorenzo, Tarija, esta joven prodigio se destacó entre más de 150 competidores, logrando alzarse con dos medallas de oro y una de plata, lo que la posiciona como una de las figuras emergentes del ajedrez en Bolivia.
A pesar de su impresionante actuación, la pequeña no contó con el apoyo de instituciones gubernamentales ni deportivas para su participación en el evento internacional. Todo el respaldo necesario provino de su padre, quien cubrió los gastos y estuvo presente a su lado durante la competencia.
El éxito de Gallardo es un claro testimonio de que el talento y la perseverancia pueden prevalecer frente a las dificultades. Sin embargo, su historia también resalta una problemática significativa: la escasez de inversión y apoyo a jóvenes deportistas en disciplinas menos convencionales, como el ajedrez, por parte de las entidades gubernamentales.
El triunfo de María José no solo representa un motivo de orgullo para su región y el país, sino que también subraya la urgencia de establecer políticas públicas que fomenten el desarrollo del deporte en todas sus variantes, asegurando que niños y jóvenes con habilidades excepcionales tengan acceso a las oportunidades que merecen
