La situación actual y las aspiraciones futuras del club Oriente Petrolero fueron recientemente expuestas por el delantero Gilbert Álvarez, quien compareció junto al flamante director técnico, Álvaro Peña. Álvarez detalló la exigente rutina de entrenamientos, que incluye sesiones en horarios poco convencionales, reflejo de la intensidad característica de los métodos de Peña. A pesar de la demanda física, el plantel ha acogido positivamente este régimen, demostrando un compromiso unánime para elevar su rendimiento. Esta preparación intensiva es crucial de cara al próximo encuentro del viernes, donde enfrentarán a Always Ready en El Alto a las 15:00.
Respecto a los resultados obtenidos en condición de visitante, Álvarez asumió la plena responsabilidad de los jugadores por las inconsistencias. Subrayó la conciencia del equipo sobre la deuda que mantienen con la afición y la institución, enfatizando que la historia de Oriente Petrolero demanda victorias en cualquier cancha. El objetivo inmediato es romper la racha adversa fuera de casa y asegurar un triunfo vital.
En cuanto al estilo de juego propuesto por el técnico Peña, con quien Álvarez ya compartió un exitoso período en Wilstermann, el atacante confirmó la consistencia de su filosofía. Peña promueve un fútbol ofensivo, basado en la presión alta y la iniciativa constante, buscando que el equipo sea protagonista. Esta propuesta táctica ha sido bien recibida por el grupo, que se encuentra en plena fase de adaptación. Álvarez destacó la capacidad del entrenador para potenciar las habilidades individuales de cada futbolista, instando a sus compañeros a aprovechar al máximo esta guía.
Al referirse a la línea ofensiva, que cuenta con talentos como Amaral, Centurión y Henry Vaca, Álvarez expresó optimismo sobre la creciente conexión entre ellos. Aunque el proceso de conocimiento mutuo sigue en curso, señaló avances prometedores y la expectativa de generar resultados concretos en el menor tiempo posible.
Mirando hacia el cierre del torneo, Álvarez adoptó una postura realista. Afirmó que la meta principal ahora es asegurar un cupo en una competición internacional. Reconoció que el desempeño en el torneo largo se vio comprometido por la falta de puntos sumados fuera de casa. No obstante, la ilusión de disputar una copa sigue intacta, junto con el propósito de consolidar un grupo fuerte y cohesionado. Enfatizó un enfoque paso a paso, priorizando los tres puntos del próximo viernes.
Finalmente, Álvarez compartió su perspectiva sobre la oportunidad de volver a ser dirigido por Peña, rememorando la etapa en Wilstermann donde bajo su mando se consagró campeón y goleador. Manifestó su deseo de replicar ese éxito en Oriente Petrolero, resaltando el profundo conocimiento de Peña sobre el oficio del delantero y su habilidad para transmitir valiosa experiencia. La clave, concluyó, radica en la capacidad de los jugadores para capitalizar esta dirección.
El equipo se alista para el desafiante viaje a El Alto, con la imperiosa necesidad de sumar puntos y generar un impulso anímico significativo antes del esperado clásico cruceño
