El club de fútbol Oriente Petrolero continúa en una posición delicada dentro de la tabla de clasificaciones, tras sufrir una nueva derrota por dos goles a cero frente a The Strongest en un clásico disputado en la ciudad de La Paz. Los tantos que aseguraron la victoria para el conjunto local fueron obra de Andrés Chávez, quien perforó la red en ambas mitades del encuentro.
El equipo albiverde se mantiene entre los clubes que han encajado la mayor cantidad de goles en lo que va del torneo. Esta vulnerabilidad defensiva, combinada con una evidente falta de acierto en la ofensiva, presenta un desafío complejo para el esquema táctico de Álvaro Peña, que no logra encontrar la fórmula para generar peligro ni para contener la constante amenaza de sus adversarios.
Las falencias en la retaguardia persisten, manifestándose no solo en los laterales, sino también en una notable descoordinación de la zaga central que no consiguió sincronizarse adecuadamente ante un rival que capitalizó sus oportunidades sin un esfuerzo excesivo.
La escuadra de Santa Cruz parece inmersa en un prolongado proceso de reestructuración, y esta última caída se suma a una racha de resultados adversos que comprometen seriamente sus aspiraciones de acceder a competiciones internacionales. El club se encuentra sumergido en una profunda crisis institucional, una situación que no ha mostrado signos de mejora, persistiendo desde la partida de Ronald Raldes hasta la actual gestión de Gustavo Gutiérrez.
El próximo jueves, 2 de octubre, se reeditará este enfrentamiento entre Oriente Petrolero y The Strongest, esta vez en el marco de la Copa Bolivia. El encuentro tendrá lugar en el Estadio de Real Santa Cruz