A las 15:00 horas, el estadio IV Centenario de Tarija será el escenario donde Oriente Petrolero cierre su participación en el torneo Clausura enfrentándose a Real Tomayapo. Este encuentro se presenta como un mero trámite, dado que ambos equipos han quedado fuera de la lucha por un cupo internacional y han logrado distanciarse de la zona de descenso desde hace varias jornadas.
En la clasificación acumulada, Oriente Petrolero se sitúa en la décima tercera posición con 45 puntos, mientras que su rival, Tomayapo, ocupa el octavo lugar con 51. A lo largo del torneo, ambos equipos llegaron a compartir el tercer puesto, pero en la segunda vuelta sufrieron un notable descenso en su rendimiento, lo que les costó valiosos puntos.
La situación actual de Oriente es alarmante. La falta de liderazgo se ha hecho evidente, con un presidente y una directiva que han mantenido un bajo perfil durante casi todo el año, llevando a uno de los clubes más emblemáticos del país a una crisis profunda. A tan solo una semana y media de finalizar el año, los jugadores del primer equipo han expresado su preocupación por los salarios pendientes, que se encuentran entre 9 y 11 meses de atraso. Esta situación también afecta al cuerpo técnico, al personal médico, a los auxiliares, utileros y administrativos del club.
Alejandro Torres, arquero del equipo, compartió su sentir tras el último encuentro contra Bolívar, señalando que el grupo está desmotivado y que han enfrentado meses difíciles que han impactado su capacidad competitiva. “Estamos compitiendo hasta donde podemos; hemos estado casi tres semanas sin entrenar y hemos intentado hacer que la dirigencia reaccione, pero no ha sido posible”, comentó.
En cuanto al arbitraje del partido, Juan Carlos Huanca será el encargado de dirigir el encuentro, asistido por Willy Cáceres y Humberto Zapata en las bandas, mientras que el VAR estará a cargo de Ronald Mamani