En un giro reciente dentro del panorama político nacional, un destacado precandidato presidencial y exmandatario ha emitido una comunicación dirigida a un líder de la oposición, con el propósito de aclarar su postura en relación a un proceso interno de selección de candidaturas. La misiva, cuyo contenido ha trascendido a la opinión pública, aborda la controversia suscitada en torno a la continuidad de una encuesta destinada a definir al representante de un bloque opositor.
En la comunicación, el precandidato desmintió categóricamente cualquier insinuación de haber abandonado el acuerdo político preexistente. En este sentido, estableció una serie de condiciones consideradas esenciales para la prosecución de la mencionada encuesta. El primer punto destacado en su mensaje se centra en el estricto cumplimiento de la normativa vigente, proponiendo formalmente la solicitud de los permisos correspondientes para la realización del sondeo, así como la acreditación oficial de las empresas encargadas de llevarlo a cabo. Argumenta que adherirse a los procedimientos legales constituye una garantía de transparencia y confianza para todas las partes involucradas.
En un segundo término, el precandidato abordó la cuestión de la confidencialidad del proceso. Recordó un incidente reciente de filtración de correspondencia privada, subrayando la necesidad de preservar la reserva de las deliberaciones y trabajos técnicos en curso, especialmente ante la proximidad de fechas límite relevantes para la conformación de alianzas políticas. En este contexto, señaló que el margen temporal existente hasta el 18 de abril permitiría avanzar tanto en la encuesta como en la implementación de medidas que aseguren la discreción necesaria.
Finalmente, el tercer punto de su comunicación se refiere a la fiscalización del proceso de encuesta. El precandidato enfatizó la naturaleza eminentemente técnica de esta tarea, insistiendo en la importancia de evitar declaraciones públicas que puedan interferir o distorsionar el trabajo de los especialistas. En su opinión, la reserva debe mantenerse rigurosamente hasta la divulgación oficial de los resultados, garantizando así la objetividad y credibilidad del proceso.
Esta comunicación surge como respuesta a interpretaciones iniciales que sugerían una posible retirada del precandidato del proceso de selección interna, derivadas de declaraciones previas en las que manifestaba ciertas reservas sobre la encuesta. No obstante, con su reciente mensaje, el precandidato reafirmó su adhesión al bloque de unidad opositora, insistiendo en que su compromiso con la unidad permanece intacto. Concluyó su misiva reiterando su llamado a la observancia de la legalidad como pilar fundamental para la construcción de un proceso transparente y confiable, descartando cualquier intención de apartarse de la unidad política que representa
