La reciente propuesta de la Cooperativa de Servicios de Agua y Alcantarillado de Tarija (Cosaalt) para aumentar las tarifas ha generado un fuerte rechazo por parte de la Federación Departamental de Juntas Vecinales (Fedjuve) y la Federación de Trabajadores Gremiales de Tarija. Ambas organizaciones han manifestado su oposición a lo que consideran un tarifazo, argumentando que esta medida impactará negativamente en la economía de las familias en un momento ya complicado por la crisis.
Desde Cosaalt, se ha justificado el incremento en las tarifas como una respuesta a la creciente carga de los costos operativos, especialmente en lo que respecta a insumos y repuestos que deben ser importados para asegurar la continuidad del servicio. La cooperativa sostiene que la escasez de dólares en el país ha encarecido estos materiales, lo que hace necesario ajustar las tarifas actuales para poder cubrir los gastos de operación y mantenimiento.
Celestino Barro, líder de la Fedjuve, ha expresado su descontento con la propuesta y ha indicado que su organización está lista para afrontar el proceso de socialización que Cosaalt planea llevar a cabo en los diferentes barrios de Tarija. Barro enfatizó que la Fedjuve se mantendrá firme en su postura, ya que no desean que los usuarios se vean perjudicados económicamente. Además, subrayó que cualquier aumento debe ser aprobado por la Autoridad de Fiscalización y Control de Pensiones y Seguros (APS), que es la entidad encargada de regular las tarifas.
Enoc Ocampo, representante de la Federación de Gremiales de Tarija, también se mostró preocupado, advirtiendo que este incremento podría agravar la ya precaria situación económica que enfrentan muchas familias en la región. Ocampo argumentó que no debería considerarse ningún aumento en un servicio esencial, dado el contexto actual de incremento en el costo de la canasta básica, el transporte y la escasez de combustibles, lo que solo añadiría una carga adicional a la economía familiar.
Cosaalt ha presentado un cronograma de socialización con el objetivo de dialogar con los ciudadanos en los distintos distritos de Tarija, explicando las razones detrás del aumento propuesto y recogiendo opiniones de los usuarios. La cooperativa espera que estos encuentros sirvan para aclarar los motivos del ajuste antes de presentar un informe final a la APS, que será la encargada de evaluar y decidir sobre cualquier modificación tarifaria.
La propuesta de Cosaalt ha suscitado un debate sobre el acceso a servicios básicos en medio de un contexto inflacionario y de dificultades económicas en Bolivia. Mientras la cooperativa argumenta que el incremento es necesario para mantener la calidad del servicio, las organizaciones sociales defienden que el acceso al agua es un derecho fundamental y que los ajustes no deben recaer sobre la población.
Se anticipa que la socialización en los barrios en los próximos días proporcionará más información sobre la propuesta, y se espera que tanto la Fedjuve como la Federación de Gremiales continúen defendiendo los intereses de los usuarios. La respuesta de la APS será crucial para determinar el destino de esta medida, que, de ser aprobada, tendría un impacto significativo en la economía de los hogares tarijeños