Roberto León, líder de la Central Obrera Departamental (COD) de Tarija, ha expresado la necesidad de que se haga justicia en relación con los actos que, según él, han ocasionado severos daños económicos y sociales en el país. Según León, estas acciones han provocado pérdidas significativas que han afectado de manera directa a los trabajadores, generando un ambiente de luto y sufrimiento en la comunidad.
El dirigente enfatizó que aún hay muchos responsables, tanto intelectuales como materiales, que deben rendir cuentas por los daños ocasionados a la economía y a la vida de las personas. León subrayó que estos actos son delitos reconocidos por la Constitución y que, por lo tanto, deben ser sancionados conforme a la ley. La COD se mantiene firme en su demanda de que los implicados enfrenten las consecuencias legales de sus acciones.
Además, León hizo hincapié en que entre los delitos en cuestión se encuentra la sedición, un delito grave según la Constitución Política del Estado de Bolivia. Afirmó que todos los involucrados deben ser llevados ante la justicia, destacando que sus acciones no pueden quedar impunes. La COD solicita al Estado que aplique la ley de manera equitativa, asegurando que todos los responsables enfrenten los cargos correspondientes.
La postura de la COD refleja la creciente preocupación de los trabajadores en Tarija, quienes buscan una resolución legal que restablezca el orden y proteja sus derechos laborales y sociales
