El sector de panificación en Santa Cruz ha anunciado un ajuste en el precio del pan para el consumidor final. A partir del próximo lunes 28, el costo por unidad se modificará, ya que los productores señalan que la elaboración a 50 centavos por pieza se ha vuelto insostenible debido al constante incremento en el costo de los insumos.
Según explican representantes del gremio, la escalada de precios de las materias primas en los últimos meses ha hecho inviable mantener las condiciones de producción anteriores. Ingredientes fundamentales como la harina, la manteca y el azúcar han experimentado aumentos significativos en sus valores de mercado.
A modo de ejemplo, se menciona que el quintal de harina, que antes se adquiría entre 200 y 250 bolivianos, actualmente se encuentra en un rango de 360 a 380 bolivianos. Esta situación se replica con otros componentes esenciales para la elaboración del pan.
Ante este panorama, se ha determinado que el nuevo esquema de precios será de 6 unidades por 5 bolivianos en los mercados. En las tiendas de barrio, el precio establecido será de 1 boliviano por unidad.
Si bien la calidad del producto se mantendrá, se ha indicado que el tamaño del pan será ligeramente superior para compensar el nuevo precio, ofreciendo al consumidor una pieza de mayor peso.
Una de las razones esgrimidas por el sector es la falta de apoyo estatal específico para la región de Santa Cruz. Se señala que este departamento es el único que no recibe subvenciones, a pesar de haber participado en mesas de trabajo y solicitado asistencia en ocasiones anteriores sin éxito.
Asimismo, se reporta que la posibilidad de acceder a créditos o adquirir insumos a plazo, una práctica previa, ya no está disponible. Los panificadores manifiestan que se han agotado las reservas y el capital, lo que dificulta la continuidad de la producción bajo las antiguas condiciones.
Desde el sector, se ha hecho un llamado a la comprensión de la ciudadanía, explicando que la situación económica actual, con el alza generalizada de precios, afecta también a los productores y hace imposible sostener el precio anterior del pan.
El sector panificador se mantiene en estado de emergencia y no descarta la adopción de nuevas medidas si no se encuentran soluciones que alivien la presión sobre los costos de producción.
Cabe recordar que en enero se alcanzó un acuerdo a nivel nacional entre la Confederación de Panificadores de Bolivia y el Gobierno para mantener el precio del pan en 50 centavos. Dicho acuerdo contemplaba precios preferenciales para materias primas como manteca, azúcar y levadura, además de un compromiso de subvención para la harina. Sin embargo, este beneficio no habría alcanzado a todas las regiones del país