La Federación Boliviana de Fútbol (FBF), a través de su Dirección de Competiciones, ha emitido una aclaración detallada en respuesta a las recientes inquietudes surgidas en torno a las sanciones que pesan sobre el Club Wilstermann. La entidad nacional ha buscado delimitar su esfera de acción frente a las normativas del fútbol internacional.
La FBF ha subrayado que carece de competencia para interceder en los procesos iniciados por la FIFA. Las restricciones de registro de jugadores que afectan al equipo cochabambino son de jurisdicción estrictamente internacional. Se ha enfatizado que únicamente la FIFA, a través de su Tribunal del Fútbol y su Comisión Disciplinaria, posee la autoridad para imponer y levantar tales prohibiciones. Por ende, ni los directivos ni el personal de la FBF tienen la capacidad de modificar las determinaciones emanadas de los órganos reguladores con sede en Zúrich.
Actualmente, Wilstermann acumula siete penalizaciones de esta índole. Cinco de ellas corresponden a litigios con futbolistas como Humberto Osorio, Mathias Soto, Santiago Echeverría y Julián Palacios, además de una controversia con el club Plaza Colonia. A estas se suma una resolución del Tribunal Arbitral del Deporte (TAS), que impide al club fichar refuerzos durante dos periodos de habilitación.
En cuanto a la cronología de estas prohibiciones, algunos portavoces del club han manifestado que durante el primer periodo de habilitación de 2025, comprendido entre enero y marzo, el club debería haber estado en condiciones de inscribir futbolistas. Según su interpretación, la restricción de fichajes por el caso Gustavinho solo debía entrar en vigor a partir de julio.
No obstante, la declaración de la FBF puntualiza que el club Aviador fue debidamente notificado en cada uno de los procesos. La acumulación de estas medidas punitivas se debe directamente al incumplimiento de las obligaciones económicas. Se ha especificado que las sanciones permanecerán activas hasta que la totalidad de las deudas sean liquidadas.
Respecto al caso del futbolista brasileño Gustavo Barbosa, que generó considerable debate, la FBF reiteró que no formó parte del procedimiento. Este litigio fue gestionado íntegramente por la FIFA y el TAS, instituciones que comunicaron directamente a Wilstermann las consecuencias de la resolución.
Finalmente, la federación destacó que toda la información relevante sobre estos asuntos se encuentra disponible públicamente en los portales oficiales de la FIFA, garantizando la transparencia en la gestión de estos expedientes